No es lo mismo llevar tu Facebook personal y una cuenta de twitter o un perfil de Instagram, que gestionar los perfiles de marca de un negocio.
Puede que conozcas las herramientas, pero su uso es totalmente diferente cuando el objetivo es transmitir un mensaje comercial.
La mejor opción es dejar la comunicación en manos de profesionales, al igual que haces con la contabilidad y los suministros, pero si eres de los valientes que te lanzas a todo, aquí tienes unos consejos básicos:
Completa todos los datos. Parece una obviedad, pero con las prisas y la emoción rellenas los perfiles a medias, y después del esfuerzo que haces para que te conozcan, no saben todo lo que podrían sobre ti.
Refleja la verdad. Las redes sociales tientan al postureo, pero tu negocio no se mantiene de likes, sino de clientes reales. Cuenta tu verdad, tanto con palabras como con fotos, o solo irán a verte una vez, para no reconocerte.
Contesta siempre. Siempre es siempre, ya sean dudas, halagos, quejas o reclamaciones. Las redes sociales son una ventana más de tu atención al cliente, cuida tus formas y aprovecha cada oportunidad de interacción.
Publica de forma periódica. Lo coges con ganas y haces 10 publicaciones al día, pero una vez pasado el primer empujón, dejas tus redes desiertas durante algunos meses, para volver con fuerza en periodos estivales. ¿De verdad esa es la imagen que quieres transmitir?
No desvíes el foco del tema. Tus perfiles profesionales no son el lugar para que opines de política, celebres la victoria de tu equipo de fútbol, o felicites el cumpleaños a un familiar. Usa tus perfiles personales para eso.
Varía tu contenido. Intenta no ofrecer siempre el mismo tipo de publicaciones, las redes sociales dan muchas opciones: imágenes, vídeos, concursos, texto, infografías, artículos, noticias...
Comunícate con aliados. Puedes relacionarte con tus proveedores y con partners que tienen sus propios perfiles, y comenzar a entretejer una red de intereses comunes.
Inspírate y aprende de tus referentes. No te animamos a copiar, que además se nota demasiado, pero darte una vuelta por perfiles de marcas a las que admiras, es una forma de mejorar tu estrategia.
Cuida las fotos. En redes cada vez queremos leer menos, y nuestro ojo se ha convertido en un detector de fotografías e imágenes llamativas, dinámicas, equilibradas y bellas. No uses tus fotos de móvil con sombras y mal enfocadas. Cúrrate unas buenas fotos o pide a alguien que te eche una mano con ello.
Anima a tus clientes a conocer tus redes sociales. Tus perfiles son un buen sitio para dar a conocer tu marca, pero también un punto de encuentro para tus clientes. Ofréceles alicientes para que te sigan e interactúen, y conseguirás unas redes llenas de vida.
Sigue estas sencillas directrices, y tus redes sociales lucirán como tu negocio merece.
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